El decano del Colegio Oficial de Criminólogos, Faustino Brañas, llama a los ciudadanos a colaborar: "Cualquier detalle insignificante puede ayudar"

Ramón Díaz Oviedo 31.08.2018 | 00:19

El asesinato del concejal llanisco Javier Ardines es un crimen "muy complejo", que requiere todo el apoyo y la colaboración de la ciudadanía para su resolución. Es el resumen telegráfico del mensaje lanzado ayer por el decano del Colegio Oficial de Criminólogos del Principado de Asturias, Faustino Brañas, sobre la muerte del único edil de Izquierda Unida (IU) en Llanes el pasado día 16, a las 6 de la mañana, cuando acababa de salir de su domicilio en La Pesa de Pría y se dirigía en su furgoneta al puerto de la villa para ir a faenar (era patrón y armador del pequeño barco pesquero "Bramadoria").

Brañas destacó que con el escaso conocimiento que tiene de los resultados de la investigación de la Policía Judicial resultaría "muy arriesgado" especular sobre el perfil psicológico del homicida u homicidas. Pero sí resaltó que no parece un "crimen habitual", porque el hecho de que no haya aparecido el arma con el que Ardines fue golpeado violentamente en la cabeza, y que aparentemente se hayan borrado huellas y vestigios hace pensar que no fue un homicidio cometido "por impulso o venganza circunstancial", sino un ataque "muy preparado, premeditado". Más aún si se confirma finalmente que hubo una especie de "ensayo" anterior y que el concejal ya se había topado en los días previos con vallas de obras que sirvieron para emboscarle y obligarle a detener su vehículo en un camino rural por el que circulaba a diario, pues era la única salida posible desde su domicilio a bordo de una furgoneta como la que conducía el día de su muerte.

A Faustino Brañas le llama la atención que el crimen siga sin aclararse después de 15 días: "No es lo normal". Esto demuestra que la Guardia Civil se enfrenta a una investigación muy complicada", a un "verdadero puzle", que los agentes intentan reconstruir para no dejar resquicio alguno antes de detener al asesino o asesinos y ponerlos a disposición de la jueza de Llanes, que instruye el caso.

De ahí que cualquier aportación de los familiares, allegados, amigos, conocidos, vecinos o compañeros del edil pueda resultar "fundamental" para la resolución del caso. "A veces un detalle que puede parecer insignificante sirve a los investigadores, porque es una pieza que en solitario parece no decir nada pero unida a todas las demás ayuda a desvelar la imagen del puzle", indicó.

Según el decano de los criminólogos asturianos los investigadores cuentan en este caso con una ventaja: "La población en Asturias es muy colaboradora".